martes, mayo 26, 2009

Patxi y el gasto en tecnología de la información


Hace unos años estaba en Toronto escuchando la conferencia de un profesor de una escuela de negocios americana. El profesor había hecho estudios empíricos sobre la aparente ausencia de efectos sobre la productividad de algunas inversiones en alta tecnología. Cuando puso el ejemplo clave yo no pude menos que dar una carcajada. Era un caso que en España conocemos muy bien.


Un leñador vasco acude a una ferretería y pide una motosierra para cortar 10.000 árboles. El vendedor se la proporciona, el leñador la paga y se va al monte a cortar árboles. Poco después regresa con la motosierra completamente destrozada y dice. ¿No decía que esta motosierra servía para cortar 10.000 árboles? Pues no he cortado ni 100 y mira como está. El vendedor perplejo no puede entender el problema, coge la motosierra en la mano, la examina con cuidado y tira de la cuerda de arranque. El motor arranca perfectamente dando un buen rugido y el leñador dice: pero ¿Qué es ese ruido?


En el ejemplo de la escuela de negocios una planta automovilística había gastado tropocientos millones de dólares en instalar una cadena de montaje flexible (motosierra). Es decir, una cadena que en vez de mantener fijos los procedimientos estos pudiesen variarse para producir coches distintos en el mismo día, variar la manera de trabajar (orden, disposición de elementos, etc). La cadena flexible tuvo un impacto nulo sobre la producción. Resulta que como era flexible permitía cualquier tipo de organización del trabajo alrededor de ella. Por tanto, los gerentes y trabajadores eligieron aquella organización que les resultaba cómoda. Es decir, la que tenían cuando la cadena de montaje era fija, no flexible (hacha). Resultado: tropocientos millones gastados para producir lo mismo que antes.


La anécdota es muy educativa para aquellos que estén pensando en mejorar la productividad con determinadas tecnologías y olvidan el papel de la formación de los trabajadores.

Desconocimiento del concepto de dinero, activo y pasivo

En los últimos días he recibido dos veces el siguiente mensaje:

Es agosto, una pequeña ciudad de costa ..., en plena temporada; cae una lluvia torrencial hace varios días, la ciudad parece desierta.
Todos tienen deudas y viven a base de créditos.
Por fortuna, llega un ruso forrado y entra en un pequeño hotel con encanto. Pide una habitación.

Pone un billete de 100€ en la mesa del recepcionista y se va a ver las habitaciones.

El jefe del hotel agarra el billete y sale corriendo a pagar sus deudas con el carnicero.
Este coge el billete y corre a pagar su deuda con el criador de cerdos.
A su turno éste se da prisa a pagar lo que le debe al proveedor de pienso para animales.
El del pienso coge el billete al vuelo y corre a liquidar su deuda con la prostituta a la que hace tiempo que no paga. En tiempos de crisis, hasta ella ofrece servicios a crédito.
La prostituta coge el billete y sale para el pequeño hotel donde había traído a sus clientes las últimas veces y que todavía no había pagado.
En este momento baja el ruso, que acaba de echar un vistazo a las habitaciones, dice que no le convence ninguna, coge el billete y se va de la ciudad.
Nadie ha ganado un duro, pero ahora toda la ciudad vive sin deudas y mira el futuro con confianza!

MORALEJA: SI EL DINERO CIRCULA SE ACABA LA CRISIS


Me apetece comentarlo porque tiene la apariencia de una de esas historias que cuenta Krugman que te cambia la vida pero, en realidad, es una solemne estupidez.
Aparentemente todo el mundo en ese pueblo tiene una deuda de cien euros. Pero en realidad, todo el mundo tiene una deuda de cien euros pero tambien le deben cien euros. Es decir, uno a uno y agregadamente todos tienen el mismo activo y el mismo pasivo. En otras palabras, no tienen una deuda neta.
Lo habrían arreglado sin los cien euros reuniéndose y perdonándose las deudas pero sería un poco engorroso. El dinero lo único que hace es facilitar la operación de cancelación de deudas.
Si todos los individuos tuviesen más deudas que activos, la diferencia sería las misma despues del incidente de los cien euros. Los cien euros no cambian la diferencia entre lo que deben y les deben a los individuos.

domingo, mayo 17, 2009

Manolo Campa


Dado el panorama intelectual de la política española tardé bastantes minutos en asimilar la noticia de que Manolo Campa iba a ser el nuevo Secretario de Estado de Economía.

Es cierto que personas de su entorno habían tenido puestos altos en la administración socialista pero eran puestos grises donde seguro que hacían mucho pero nadie se enteraba. En este caso, ya está claro lo que piensa el nuevo Secretario de Estado y todos podremos ver en el telediario de las tres sus declaraciones, propuestas y acciones.

En primer lugar, debo decir que me cuesta trabajo pensar en otra persona que combine sus cualidades. Es inteligente como pocos, es trabajador, dinámico, pragmático, dialogante, divertido, etc.

Algunos ejemplos. Se hizo un par de carreritas universitarias en Oviedo mientras otros sudábamos para hacer una. Al mismo tiempo trabajaba como becario en la Oficina de las Comunidades Europeas, viajaba en los veranos y, sobre todo, logró la admisión para el Doctorado en uno de los mejores Departamentos de Economía del mundo en 1987. Esto es una gran hazaña si lo intentas habiendo hecho la Licenciatura en, por ejemplo, la Universidad de Yale y apoyado por los que allí están. Hacerlo desde Oviedo en 1987 (no había Internet) es otra cosa e indica de lo que era capaz este hombre con veintidós años. No ha dejado de luchar un solo día desde entonces y su capacidad ha crecido sin duda.

Liquidó el Doctorado en Harvard en cuatro añitos (a partir de cinco es mucho más normal) y entró a trabajar en Stern. En pocos años le dieron la plaza fija (Tenure) y antes de aproximarse a España de nuevo se convirtió en Catedrático allí (Full Professor). Ha publicado en las mejores revistas científicas de Economía y tiene una notable capacidad divulgativa. Finalmente, su carácter pragmático le ha llevado a hacer importantes trabajos de consultoría y a participar en algún proyecto empresarial.

Es una persona fantástica, siempre dispuesto a ayudar. Te puede mandar un artículo que no tienes en la biblioteca en un par de minutos o venir a hablar a tus alumnos como ha hecho alguna vez con los míos.

Hasta aquí el comentario básico que podréis encontrar en varios lugares. Los comentarioas realmente interesantes son los siguientes:


1 ¿Por qué acepta este puesto?

En primer lugar, pierde dinero. Esto tiene que sonar raro a los políticos locales que se cuelgan por un puesto remunerado.

En segundo lugar, sus propuestas basadas en principios y resultados económicos sobre los que hay poca divergencia entre los expertos están en las antípodas de la de su jefe.


2. Mis “teorías” sobre la aceptación

a. Patriotismo, deseo de participar y de ayudar.

El país está al borde del desastre y él quiere probar a hacer algo si le dejan.

b. Conocimientos de teoría de la inversión

La probabilidad de que triunfe es muy baja pero sin duda pasará a la historia si lo hace. La probabilidad de fracaso es muy alta pero es imposible que se le atribuya a él. Se parece a los bancos que si ganan mucho se lo embolsan y si pierden lo paga el contribuyente.


Son comentarios un poco fuertes por los que le pido disculpas a Manolo pero se los debo a mis alumnos.

Zapatero se aprieta el cinturón

Ya he comprobado que el tema de sexo vende. Mis lectores han aumentando en un sólido 11% esta semana. Voy a intentar subir otro poco la audiencia con otro tema “interesante”: el cotilleo.

La noticia de cotilleo más impactante de esta semana es que Zapatero se aprieta el cinturón gastando 500 euros. Aparentemente, se presentó en un mitin de esos en lo que dice que ayudará a todos los parados con independencia de su número o de la situación económica luciendo un cinturón de Hermes o algo así.

Tengo que decir que existe alguna probabilidad de que se trate de un cinturón falso que cuesta menos de diez euros en el rastro o que, diréctamente, la noticia sea falsa. En cualquier caso la anécdota toca uno de mis prejuicios preferidos: tengo problemas con los gastos suntuarios. En otras palabras, prefiero a las personas que mantienen cierta austeridad en todas las circunstancias. Algunos ejemplos serían Amancio Ortega, el fundador de Zara, o Warren Buffett uno de los inversores más ricos del mundo.


Es un prejuicio que no tiene una base económica sólida. Los productos de lujo contribuyen al bienestar de sus consumidores y sus productores tanto como los más modestos. Supongo que mi problema esta relacionado con la siguiente cuestión técnica: ¿Qué efecto tiene una distribución de la renta más igualitaria en el mercado de productos de lujo? Mi intuición es que estos productos tendrían menos peso en un mundo más igualitario. Por tanto, no serían una bandera adecuada de las políticas de distribución que hipotéticamente abandera Zapatero. En este sentido, la chaqueta de pana de Felipe González era un atrezo más adecuado para los mítines en que se prometen ciertas cosas.

jueves, mayo 07, 2009

Sexo















Mi blog sufre una grave crisis de lectores (-28%). Ante esto tengo dos opciones:

  1. Tratar de escribir mejor sobre temas más interesantes.
  2. Hablar de sexo.


Por un día, me voy a camuflar entre el paisanaje y voy a tomar la segunda opción.


Un ejemplo de que es atractivo hablar de sexo es la atención que han prestado a los problemas sexuales del oso Furaco el diario La Nueva España y otros medios de comunicación. La página web de RTVE contiene la foto que se adjunta.


Sólo tengo que decir que necesitamos más gente como Furaco. Es un ejemplo de perseverancia: lleva mucho tiempo intentándolo. Por otra parte, todos nos quejamos de los retos diarios pero ninguno hemos tenido una relación con una pareja con las garras, los dientes y el mal genio de la de Furaco. Mi reconocimiento para este héroe cotidiano que hace lo que tiene que hacer en todo momento con independencia de las dificultades.


Otro ejemplo, es el Ayuntamiento de León. Si tú te acerca por allí y les cuentas un problema vecinal claramente circunscrito al ámbito municipal (urbanismo, movilidad, etc) te dicen:

  1. Que es competencia de FEVE, de Fomento, de la Junta de Compensación de Ampliación del Campus o del Obispo. Es decir, no son competentes.
  2. Si lo son no tienen un duro.


Si te acercas proponiendo un programa de incentivación de las relaciones sexuales para mayores de 60 años no hay problema. Son competentes. Es decir, no hay problema con el Ministerio de Sanidad, con la Consejería de Sanidad, con el Hospital ni con el Obispo. Tampoco hay problema de dinero en este caso.


He copiado esta frase de la página en Facebook de Hoy por Hoy en Leon, un programa de la Cadena Ser.


Porque ellos también tienen derecho, el Ayuntamiento de León ha organizado hoy una conferencia sobre sexualidad para personas mayores. Si no puedes asistir, siempre te quedará la radio, ya que este miércoles entrevistaremos en Hoy por Hoy León al psicólogo Jesús Núñez, que impartirá esta tarde la conferencia


Como economista les diría una cosa a los gobernantes: tengan cuidado al reconocer derechos que requieran el uso de recursos a nivel privado. El ejemplo más palmario es el del derecho a la vivienda y el derecho al trabajo. Si los entiendes como que no se le puede prohibir a nadie comprar o alquilar una casa (si tiene dinero) o trabajar (si alguien le ofrece un trabajo) no hay problema. Todos juntos ponemos los recursos para que si ese derecho se vulnera se pueda restituir. En ese caso, es un bien público que los gobiernos pueden y deben proporcionar. Sin embargo, si lo entiendes como que todo el mundo tiene que tener una casa y un trabajo te encontrarás con la maldición de la economía: recursos escasos con usos alternativos para satisfacer necesidades.


El derecho al sexo después de los sesenta es un sarcasmo a menos que se entienda que nadie lo puede prohibir. ¿Qué pasa a los sesenta? Estamos hablando de gente joven con un buen estado físico que le quedan un mínimo de cinco años de vida laboral, diez dentro de poco y quince para el momento en que yo los alcance.


Los problemas para hacer efectivo el “derecho” serían:

  1. Tener salud.
  2. Que sigas teniendo interés en el tema. Sería completamente legítimo tener menos interés que a los dieciocho o lo contrario.
  3. No tener otras preocupaciones: pensión escasa o en continuo peligro, vivir en una ciudad en que los problemas no se resuelven sino que se arrinconan hablando de otros, etc.
  4. Tener pareja y que ésta no esté afectada por ninguno de los tres primeros puntos.


Esta es mi predicción. Las diferentes instituciones harán poco o nada por la 1 y la 3 que caen dentro de sus competencias y mucho por la 2 que pertenece a la esfera intima, individual de los sufridos contribuyentes. No creo que se metan con el punto 4 pero ya me espero cualquier cosa.

domingo, mayo 03, 2009

Declaraciones impresionantes

El asturiano José María Álvarez se opone a congelar salarios «porque no sirve para mantener empleo ni para crearlo»


El Secretario de UGT en Cataluña se despacha a gusto en LNE.
Si él se cree esta afirmación, o los lectores la creen vamos a tener un disgusto muy grande en los próximos meses. Una subida del precio del trabajo en condiciones de caída de la demanda es justo lo que necesita un país con cuatro millones muy largos de desempleados.

De nuevo, creo que sería mejor escuchar a quienes han pensado, analizado y medido afirmaciones de este cariz.

http://www.crisis09.es/propuesta/

¿Quién escribe los titulares de LNE?

No podía creer el titular que supuestamente resumía las declaraciones de Adriano Mones a LNE.

«La reforma laboral es antiquísima, pero éste no es momento de legislar, sino de resolver»


A mi me suenan a un posicionamiento muy cercano al discurso sindical y gubernamental del viernes. Sin embargo, la sorpresa viene si se leen las declaraciones completas.



-¿Hay que hacer una reforma laboral?

-Diría que sí, porque la que tenemos es antiquísima y han cambiado las circunstancias. Ahora el teletrabajo es una realidad que no está bien regulada, como tampoco se ha transmitido bien la conciliación de la vida laboral y familiar, ni se ha explicitado correctamente el trabajo a tiempo parcial, cuando en otros países aumenta la empleabilidad y no hay tantas trabas para todos.

-¿Y abaratar el despido?

-Mientras las cosas fueron bien, nadie se preocupó de si 45 días de indemnización eran muchos o pocos. Hay que revisar y mejorar las leyes, pero hay que hacerlo tranquilamente y pensando que el mundo de hoy no es el de hace 40 años, y que el que ahora quiere contratar tiene cantidad de fórmulas y tipos de contratos para hacer. Éste no es el momento de discutir si legislar o no, sino de resolver los problemas, y cuando haya tranquilidad para legislar, que se haga. Pero que no se nos olvide, como ocurre cuando las cosas van bien.