domingo, octubre 26, 2008

Problemas en Rumanía. Continuación.

Mi antiguo alumno Chema L. del Hoyo me escribe el siguiente mensaje. Se trata del análisis interesante e informativo de una persona que tiene conocimientos de Economía y vive en el mundo real. Cuando uno recibe un mensaje así se alegra de tener el trabajo que tiene y conocer a la gente que conoce.

Bueno, yo creo que el análisis no puede ser tan reduccionista como el que realiza el periodista y sí que existe un grave problema. Los salarios se están ajustando, con un crecimiento real del entorno del 15% en el último año y la economía crecía en el primer semestre de 2008 un 8,8%, lo que esta generando una fuerte demanda interna, con la consiguiente presión inflacionista, a lo que se añade una cada vez más insostenible burbuja inmobiliaria que dificulta el acceso a la vivienda en la principales ciudades (Bucarest, sin llegar a los niveles de Madrid o Barcelona, se sitúa próxima a ciudades como Zaragoza o Valencia). Esto supone que muchos emigrantes se piensen mucho el volver, pues los salarios, aunque fuesen iguales a los que ahora tienen, no les supondría vivir mejor y ni siquiera esta asegurado vivir igual. (Un litro de leche en Bucarest esta por encima del euro en las marcas más baratas, por no hablar del aceite o del pan). Según mi experiencia con el mismo salario se vive mejor en León que en Bucarest, que es donde existe mayor falta de mano de obra. Pero quizá igualmente importantes son los factores sicológicos, la situación política y social en Rumanía en los 15 años posteriores al comunismo fue de mal en peor, con deterioro de los servicios públicos y corrupción en niveles insoportables creando en muchos un nivel de pesimismo tal en su propio país que no están dispuestos a volver, pues no creen que pueda mejorar a largo plazo.

En relación a las infraestructuras y los fondos europeos existe otro problema, muchos de estos están asignados a un año determinado y si no se desarrollan los proyectos estos fondos se pierden. En el año 2007, primer año de Rumanía como miembro de pleno derecho de le UE aunque pueda parecer increíble, el país fue contribuyente neto debido a la imposibilidad de absorber todos los fondos asignados, en 2008 se espera que esta situación cambie, aunque no en todo lo que sería necesario. Buena parte de la culpa se deriva de la ineficiencia de las administraciones públicas, que el Gobierno naturalmente no menciona en el análisis que proporciona a la prensa.

En relación al trabajo cualificado la situación es igualmente mala, las empresas extranjeras que invierten en el país se encuentran como en ocasiones es más barato traer personal expatriado de España, por ejemplo, que contratar determinados profesionales locales. Pero el traer personal del extranjero es difícil debido a la mala imagen que se tiene del país, equivocada en gran medida, lo que aumento los salarios más de lo que se daría en una situación de "información perfecta".

Los precios (salarios) pueden ayudar a resolver el problema, pero existen demasiadas rigideces para que esto se haga de forma suficientemente rápida como para evitar que el crecimiento no se vea seriamente afectado, el nivel salarial es solo uno de los problemas a considerar. Mick Jagger podría ponerse a ordeñar por un salario determinado, pero ¿quien compraría esa leche?, ese es el problema de Rumanía, que los salarios pueden alcanzar un punto de crecimiento tan por encima de la productividad que la conviertan en poco atractiva, y la productividad no puede crecer en gran medida debido al pésimo desarrollo de las infraestructuras con dificultades en su desarrollo por problemas de mano de obra en los que no sólo influye el salario, insisto.

Un país no es un problema económico hipotético en un libro, y no se puede reducir el problema al ajuste de precios y salarios, existen demasiados fallos en el mercado a solucionar al mismo tiempo. Para ejemplos de modelos es mejor no usar un país es concreto, se escapan demasiados factores, al periodista y al economista que pretenda dar la solución sin conocer la situación real, y un artículo o un comunicado del Gobierno no la refleja.


Mis comentarios.

1. Mi análisis era intencional y conscientemente reduccionista. Yo quería decir que la teoría económica más básica te indicaba que había un problema que superaba ampliamente la escasez de mano de obra. La zozobra y la circularidad del artículo periodístico así lo indicaba. Empezando por el final, Chema toca sin mencionarlo explícitamente un tema importante en teoría económica: el análisis parcial (mercado de trabajo) versus el equilibrio general (el efecto del mercado de trabajo en otros mercados y viceversa). Todos sabemos cómo hacer que Mick Jagger ordeñe vacas pero no está claro cómo venderíamos la leche resultante. Pero al mismo tiempo, sabemos que son dos problemas distintos y no podemos aceptar que nos hablen del segundo y más difícil usando el lenguaje del primero.
2. Como no podía ser de otra forma el gobierno nacional y europeo tenían que aparecer por algún lado. Un inyección de fondos con restricciones absurdas (gastarlo en un determinado año) tiene efectos en la economía que no tendría la natural y calmada evolución de las preferencias, la tecnología, la renta, etc.
3. Lo más importante. Aunque puedan ayudar, el desarrollo no depende exclusivamente de los fondos europeos. De hecho, depende de la existencia de una serie de factores que no se crean de la noche a la mañana (*).

(*) Vamos a pensar en desarrollar un pueblo en el polo norte. El problema es de nuevo la “escasez” de mano de obra. No hay nadie por allí y cuando a un parado de Marbella le dices que le ofrecen un trabajo en el polo norte se lo va a pensar mucho. Un salario muy alto podría ayudar a que fuese alguna gente pero luego sería muy difícil vender lo que se produjese allí. Una solución podría ser poner calefacción hasta en las calles de esa zona del polo norte (en Minneapolis algunas calles están cerradas y tienen calefacción). La cosa podría funcionar si el gasto de calefacción fuese inferior al aumento de producto (valor añadido) que se originase. Naturalmente, instalar la calefacción ambiental allí se parece al tipo de infraestructuras que abordan los gobiernos. Es decir, sin entrar en excesivos tecnicismos parece que tiene características de bien público.
Volvamos a Rumanía. La verdadera razón para que haya “escasez” de mano de obra es que el país no es atractivo para sus emigrantes. La buena noticia es que, a priori, parece más fácil mejorar el gobierno y la calidad de vida en Rumanía que instalar calefacción en las calles del polo norte. La mala noticia es que no es tan fácil cómo parece. El desarrollo institucional que hace que la gente pueda vivir y trabajar a gusto no es fácil de construir. Mi intuición es que no se trata solamente de un bien público que pueda ser proporcionado por un gobierno bienintencionado (aunque puede ayudar) contratando policía, jueces o aprobando leyes sensatas. Se trata también de una externalidad que surge del comportamiento de cada ciudadano y no estoy seguro de que se entienda bien cómo funciona ese proceso. Suiza es lo que es porque tiene leyes e instituciones pero también porque sus ciudadanos validan esas leyes e instituciones con su comportamiento.
Estas ideas no son realmente mías. Las he tomado prestadas de la literatura más avanzada sobre Desarrollo Económico. En este sentido, recomiendo la página web de Daron Acemoglu en el Departamento de Economía del MIT.



1 comentario:

Javier García dijo...

Me parece sumamente interesante lo que cuenta Chema. Y es muy interesante porque muestra que muchas veces las soluciones no son obvias. Lo que cuenta de Rumanía tiene otras implicaciones por ejemplo en España y, dentro de ésta de algunas Comunidades Autónomas. Por ejemplo, mucha gente piensa que la solución a todos nuestros problemas en España es la I+D+i y, por tanto, la manera obvia de resolverlo, para algunos, es metiendo recursos. ¿Qué pasa si multiplicamos por 100 los recursos públicos de España en I+D+i? Pues que no se pueden absorber, como tampoco Rumania puede absorber los fondos europeos. Se necesita lo que decís, una población y un tejido empresarial que permita asumir esto con facilidad, además de unas instituciones ágiles y que puedan ayudar y no torpedear.
En definitiva, que hay cosas que no se arreglan con dinero, sigo diciendo que los "climas", ese intangible que se respira en los sitios, es lo que verdaderamente marca la diferencia. Los indios han sido capaces en Bangalore de crear un Silicom Valey a la India, eso mismo, aunque quisiéramos no se podría hacer en cualquier sitio. Se necesitan muchas cosas para que las cosas ocurran a la vez.
Este post es realmente instructivo en todos estos ámbitos.